Es posible que la primera vez que un profesional de la salud visual nos habla de higiene visual no sepamos a que se está refiriendo exactamente. ¡No os preocupéis! Es bastante sencillo. Las normas de higiene visual están destinadas a controlar los factores que pueden provocar un efecto nocivo sobre la visión. Es decir, mantener una correcta higiene visual nos ayudará a tener un mejor rendimiento y menor fatiga visual.
A continuación, podréis ver las principales medidas de higiene visual que, aunque no resuelven totalmente los problemas visuales, ayudan a mejorarlos y a conseguir una mejor eficacia visual.
- Hay que sentarse correctamente: pies apoyados en el suelo y espalda recta.
- Los muebles deben ser apropiados: la silla debe ser regulable en altura y la mesa de trabajo debe estar en un plano inclinado de unos 15 a 20º.
- La iluminación es muy importante: hay que leer y estudiar con una iluminación en el techo y otra directamente en el plano de trabajo, que no dé directamente en los ojos, que no deslumbre y que no haga sombra al escribir. Colocar el flexo a la izquierda si la persona es diestra y a la derecha si es zurda.
- La distancia de lectura no tiene que ser demasiado corta, la distancia ideal es aproximadamente del codo hasta la primera falange.
- Al leer, los antebrazos han de estar apoyados sobre el plano de trabajo.
- No se debe leer con movimiento de cabeza, sino con los ojos. Si esto no es así puede ser un signo de problema visual.
- Se debe situar la mesa de trabajo, a ser posible, delante de una ventana para poder mirar a lo lejos cada cierto tiempo. De esta forma podemos cumplir la famosa regla 20-20-20, que consiste en mirar cada 20 minutos a 20 metros durante 20 segundos.
- Interrumpir la actividad visual prolongada en visión próxima, levantando la cabeza o cambiando de postura.
- En cuanto a la televisión, se deben evitar los brillos. Nunca se debe de ver con la luz apagada, demasiado cerca, ni tumbado en el suelo.
- La dieta alimenticia debe ser rica en vitamina A (leche, zanahorias, ciruelas, yema de huevo), verduras y frutas.
- Son recomendables las salidas a espacios libres o abiertos